El Camino de Santiago tiene tantos contrastes y tantas emociones, que sería imposible recogerlo en cualquier reportaje fotográfico. No obstante voy a dejar algunas fotos de mi segundo Camino, (seguramente no sea el último) como recuerdo y también para aquellos que están pensando si hacerlo o no, para que les anime y lo hagan. Yo, siempre que me preguntan, animo a que lo hagan, cada uno desde su condición y por el motivo que quiera, cultural, religioso, deportivo, social, etc. Pero aquel que haya sentido la curiosidad y la inquietud alguna vez, que lo haga, al menos, una vez en la vida y que tenga su propia experiencia y así, su propia opinión.
Desde el punto de vista físico, desde Sarria que es la parte del Camino más tradicional y transitada, yo diría que todo el mundo puede hacerlo, incluso personas que puedan tener alguna discapacidad pues está adaptado para casi todos.
Creo, sinceramente, que todo el que se anime vivirá una experiencia difícil de explicar y por eso lo mejor es que cada uno viva y sienta su propia experiencia, porque como me dijo una señora voluntaria en Sarria, "el Camino es, debe ser, una experiencia personal de cada peregrino, aunque se haga en grupo".
"Buen Camino"